Hoy llega a las salas El Candidato, tercer filme de Álvaro Velarde luego de El Destino No Tiene Favoritos y La Cosa.
Es el debut en la pantalla grande de Los Chistosos de RPP – Guillermo Rossini, Hernán Vidaurre, Manolo Rojas y Giovanna Castro – para la historia de una campaña electoral que más se asemeja a un circo. La película originalmente iba a estrenarse durante la segunda vuelta electoral, lo que la hubiese hecho aún más oportuna.
Esta campaña en la ficción será muy familiar para los que hayan seguido la política en el Perú en los últimos 10 o 15 años. Ego Pereira (Vidaurre) es un ex mandatario que intenta alcanzar el sillón presidencial por segunda vez, apelando al populismo y con una campaña cuya financiación nadie puede explicar (Castro es su fiel asesora). Napoleón Córdoba (Rojas) es un graduado de la Universidad de Wisconsin con una esposa extranjera que ha asumido la cultura peruana como propia. También están un académico con la educación como único caballito de batalla y un militar manipulado por su esposa, asesor y padres (Rossini y Haydee Cáceres). Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia (¿?) y es debatible si es que la política peruana no es ya de por sí, una comedia absurda.
Completan el reparto Saskia Bernaola, Mónica Sánchez, César Ritter, Alberick García, Patricia Portocarrero, Bernie Paz, David Villanueva, Pold Gastello y Elena Romero.
“La política se presta mucho para la comedia”. Explicó Velarde en una conferencia de prensa previa al estreno. “Un político lo que hace es mostrar una imagen exterior y al interior tiene un comportamiento que no corresponde”. La meta del director era mostrar este doble discurso de los políticos, una buena base para la comedia irónica, además de invitar al público a reflexionar sobre el populismo y sobre por qué le terminamos dando nuestro voto a personajes como estos. Para ello, tomó prestadas anécdotas políticas de los últimos años, que son “delirantes, sobrepasan lo imaginable a veces.”
Tal vez el mayor reto era traducir el humor de Los Chistosos en la radio, más basado en la improvisación, al cine, bajo un guión estructurado; el mismo Rossini se considera enemigo de los libretos. “Parte de trabajar con los actores es lo que ellos te dan.” Dice el director. “Los actores dan más de lo que está en el guión y uno tiene que tener la lucidez para aceptar o no aceptar.”
Velarde recibió bastante de los cómicos, quienes tenían más de una sugerencia para crear situaciones de humor al momento de filmar, una experiencia nueva para estos expertos en sátira política, que esta vez se tuvieron que amoldar a las exigencias de un director. El resultado puede comprobarse en salas desde hoy.
«Hay varios Oscares de por medio: Oscar Ramírez, Oscar…»
Agradecimientos: Álvaro Velarde, Los Chistosos, Grupo ABC, Iván Begazo