Transcinema Festival Internacional de Cine de No-Ficción celebrará su cuarta edición del 2 al 9 de diciembre; ocho días de proyecciones, seminarios, laboratorios y conversatorios.
Desde su creación, Transcinema ha buscado formas cinematográficas que vinculen lo empático y lo político con la experimentación. Siempre en la búsqueda de un cine que abarque todos los temas, hasta los más difíciles, encuentre nuevos formatos y que no practique la autocensura.
En palabras de su director, John Campos Gómez: “Declaramos que nuestra manera de hacer cine es compartiendo el cine que nos inquieta, que nos acerca a los otros y se manifiesta revulsivo en cada detalle. Más que experimental, es cine experimentador.”
El invitado especial para esta cuarta edición será el documentalista chileno Ignacio Agüero, quien presentará su última película, Como Me Da La Gana 2, donde el director interrumpe los rodajes de sus colegas para conversar sobre sus películas y su esencia cinematográfica; se trata de una continuación de una cinta que Agüero realizó hace 30 años, donde conversaba con otros cineastas sobre el tener que rodar en plena dictadura pinochetista.
La cuarta edición de Transcinema llega luego de realizarse el TransLAB Cuzco, una especie de residencia creativa donde los participantes recibieron las herramientas para realizar piezas audiovisuales de temática libre. Buscando ser pieza clave de la evolución del cine nacional, el festival fue la principal influencia detrás de Corriente Encuentro de No-Ficción, evento realizado en Arequipa; la Ciudad Blanca será la sede descentralizada este año.
La programación se dará a conocer en los próximos días; por lo pronto, Transcinema adelanta dos títulos:
Austerlitz (Alemania, 2016) de Sergey Loznitsa
Un retrato crudo y complejo de los turistas que visitan los terrenos que formaron parte de los campos de exterminio nazis y un estudio, con audaz ironía, de la relación (o el choque) entre la cultura contemporánea y la santidad del sitio.
Gulistán, Tierra de Rosas (Canadá, 2016) de Zayne Akyol
La cara oculta de una guerra mediatizada. Ellas pertenecen al PKK, el partido de trabajadores del Kurdistán y también son un movimiento guerrillero acitvo cuyo objetivo es defender los territorios kurdos en Irak y Siria de los ataques de ISIS. Gulistan, terre de roses se aproxima a la vida marcial de combatientes femeninas como Rojen y Sozdar, quienes comparten sus ideas y anhelos en un conflicto que no solo es territorial.
Agradecimientos: Jandira Palomino y Eliana Fry